Con todo lo sucedido el año 2020, se esperaba y se proyectaba que este año, existiera un alza en las compras de vivienda, pero esto se ha visto impactado con la incertidumbre que se vive a nivel país. Las elecciones presidenciales, los retiros en los fondos previsionales y la amenaza de una posible alza en los contagios, han hecho que las ventas se muevan un poco mas lento de lo esperado.
Si bien el panorama era alentador, las fuertes alzas en las tasas de interés y la baja en el plazo de crédito hipotecario también se han transformado en factores que influyen directamente sobre los pronósticos para este 2021 y deja incertidumbre para lo que viene este 2022.
Pero así y todo, conseguimos mirar con optimismo el rubro inmobiliario ya que este no se detiene. Si las personas no compran, entonces arriendan. Y esto es un factor para considerar para aquellos que tienen la posibilidad de invertir en un bien raíz.
Si lo que se desea es invertir y obtener rentabilidad inmediata, la recomendación es buscar en el mercado las propiedades que se encuentran arrendadas. De esta forma, comienza a percibir la renta de inmediato, sin tener que buscar un arrendatario.
Por otra parte, no podemos olvidar que aun siguen vigente los subsidios habitacionales y esto ayuda a dar movimiento a los inmuebles de menor valor y tamaño.
A pesar de lo incierto que ha estado el mercado y las proyecciones sobre este, estas últimas semanas se han registrado bajas en las tasas de interés. Por lo que esperamos que el mercado se vuelva a reactivar, las ofertas vuelvan a aparecer, y que las personas que tengan la oportunidad comprar, puedan hacerlo siguiendo las recomendaciones y la asesoría de un experto.